La titular de la Asociación Madres de Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini, fustigó el uso de pistolas Taser por parte de la Policía Metropolitana, al sostener que esa entidad "se siente particularmente afectada cuando se pretende insertar en la sociedad un instrumento de suplicio eléctrico".
Bonafini advirtió que las descargas eléctricas de esa arma "inexorablemente", estarán dirigidas "a los sectores víctimas de la marginación y exclusión social forzadas", entre los que ubicó a "los sin techo".
En un escrito de tres carillas presentado esta mañana ante el juez federal Claudio Bonadío, Bonafini solicitó que la entidad que encabeza sea tenida como querellante en la causa "atento a la actividad que ha desarrollado a lo largo de su historia" la Asociación.
Patrocinada por el abogado Eduardo Barcesat —el letrado que inició la denuncia contra Mauricio Macri y el ministro Guillermo Montenegro por presuntos "actos preparatorios del delito de torturas"— y los letrados Antonio Rojas Salina y María Jaume, Bonafini reclama poder intervenir en las actuaciones.
En el escrito presentado ante Bonadío, Bonafini alude a la decisión adoptada por el Jefe de Gobierno porteño de equipar a la Policía porteña de las pistolas Taser.
La presentación añade que "además, la picana eléctrica, un instrumento de triste memoria para el pueblo argentino y de empleo dilecto de estos `anatomistas del dolor humano`, como los definiera Michel Foucault, impone considerar la utilización de estas pistolas como una recreación de la metodología de la dictadura militar".
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